Quien no recuerda aquellos anuncios de televisión...
La Kina San Clemente, por ejemplo, una bebida reconstituyente para abrir el apetito a los niños elaborada a base de quinina, con el simpático "Kinito" que decía aquello de "y da unas ganas de comerrrrr".
El anuncio se hizo muy popular y el "Kinito" lo podías conseguir enviando unos cuantos tapones, no recuerdo cuantos.
Mi madre nos daba a mi hermana y a mí una cucharadita de Kina San Clemente antes de comer para abrirnos el apetito y, fíjate, ahora nos ponemos a dieta ¿no es gracioso?, es lo que tiene la vida...
Claro yo también me acuerdo de Kinito, también yo lo tomaba pero sin embargo no recuerdo como conseguirlo enviando tapones.Tiene gracia pero es así, antes no tenias dinero y podía comer y ahora que se tiene por salud, no conviene engordar, je,je.
ResponderEliminarYo no conseguí el Kinito, o había que enviar muchos tapones o no tomé demasiada Kina.
ResponderEliminarYa ni lo recuerdo!
Hay que ver el lado positivo, ahora no necesitamos ningún "Abre-apetitos"...
Creo que en casa nunca lo tomamos; sí recuerdo al kinito vestido de tuno, cuánto tiempo!
ResponderEliminarCaray, Khenai, que gracia que también lo recuerdes!
ResponderEliminarLa verdad es que ha llovido mucho desde entonces...
Qué tontería, pero parece que para ciertas cosas tengo memoria de elefante, qué lástima que me cueste tanto retener los nombres de las plantas, ofú.
ResponderEliminarBsos,
Khenai, es que algunas plantas tienen unos "nombrecitos" bastante rebuscados, je,je.
ResponderEliminarTengo un niño que no le gusta comer. El no siempre lo tiene como respuesta. Alguien me podría indicar que dosis le debería de dar y a partir de años.
ResponderEliminarGracias
Hola Anónimo!
ResponderEliminarYo no sé si todavía puede encontrarse en el mercado la Kina San Clemente, si es así podrías darle a tu hijo ¡si años atrás funcionaba, ahora también!
En cuanto a la dosis, no me atrevo a indicártela, no estoy cualificada para eso, y seguramente en algún lugar de la etiqueta tenga alguna recomendación. Tan sólo puedo decirte que a mí, cuando era pequeña, me daban una cucharada antes de comer ¡y listo!.
Espero que tu hijo abra el apetito.
Un saludo.